Sobre CRÓNICA DE MEDIOCRES

Lo he llamado Crónica de Mediocres porque creo que la mediocridad es una de las palabras que mejor definen el momento en el que vivimos. La vida pasa deprisa, las oportunidades también y entre ambas dos no hay tiempo para mejorar nada, es más, lo mejor penaliza, no se compra, la calidad se desprecia.

He elegido esta foto porque de alguna forma refleja lo antedicho, primero porque está algo borrosa, no se ve con claridad, y segundo porque para mi, esa araña es la representación de la mediocridad y su tela es el entramado en el que los mediocres caerán, caeremos, y desde la cual impedirá que escapemos, sólo unos pocos conseguirán salir, seamos nosotros.

Espero que os guste y para hacerlo más atractivo, podéis dejar vuestros comentarios picando en el título de cada entrada.

sábado, 7 de diciembre de 2019

Crónica de Mediocres 93



12 Sugerencias para (Mantener) el Equilibrio Emocional en el Trabajo

Dirigido tanto a aquellas personas que se inician o llevan poco tiempo inmersos en entornos profesionales, así como a aquellas otras ya bregadas en la vida laboral, aquí expongo una docena de sugerencias que, como el título dice, podrían ser de utilidad para el equilibrio emocional en la dura tarea de ganarse la vida. Los doce puntos que a continuación se enumeran tienen como base mi propia experiencia, o lo que es lo mismo han sido puestos en práctica por mi mismo y me siento realmente satisfecho del provecho que de su seguimiento he obtenido, para conseguir la suficiente fortaleza que me ha permitido sobrevivir sin traumas en el complejo y agresivo entorno profesional de las TIC.

Espero que esta aportación pueda seros de utilidad:

1. Allá en donde estés, y desde el minuto uno, debes conocer cuales son tus dependencias y hasta donde llegan tus influencias. Esto te evitará decepciones y te permitirá ser el director de tu propio destino.
2. Sé tu mismo, no intentes impresionar a otras personas imitando los comportamientos de otras a las que puedas admirar, esa es una difícil misión que te hará fracasar a no ser que superes a tu modelo, desde tu propia personalidad.
3. Intenta ser regular y no generar expectativas más allá de tus posibilidades, toma riesgos, son necesarios para evolucionar, pero no dejes que un exceso de ambición trunque tu meritoria carrera profesional. Todo requiere tiempo.
4.  Pon a prueba hasta que punto eres respetado. Desde los primeros momentos en cualquier asignación/destino/empresa debes analizar como estás siendo valorada, la apreciación por tu parte de cuan útil es el trabajo que estás realizando es uno de los principios que te ayudarán a mantener tu equilibrio emocional.
5.  Mantén la calma y no abandones, el desarrollo profesional y la consecución de los objetivos personales llevan tiempo, mucho tiempo, no hay atajos. Muévete como los escaladores, antes de soltar una mano y/o dar un paso, asegúrate que tienes un apoyo firme, solo entonces debes decidir el nuevo paso.
6.  Sé crítico, contigo, con el trabajo que realizas y con la compañía para la que trabajas. Tienes que aprender a auto exigirte, esto te llevará a la mejora continúa. Tienes que exigirles a tus responsables los medios necesarios para el mejor de los desempeños. Tienes que exigirle a tu empresa respaldo, confianza y recompensa, si no son capaces de darte respuestas, quizás no estés en el sitio adecuado.
7.   Si conoces una mejor forma para hacer las cosas, documéntalo y exponlo, que no te dé miedo. Si tus ideas son rechazadas, piensa en cual puede ser el motivo y mejóralas. Si son inmejorables, piensa y házselas llegar a quien identifiques como la persona realmente decisoria al respecto. Si no te hacen caso y estás convencido, ¡sáltate el escalafón!
8.  Muéstrate sin complejos y no aceptes responsabilidades si piensas que aún no estás lo suficiente maduro para asumirlas. Si estás trabajando en un entorno de mutuo respeto, renunciar a una nueva posición te consolidará como aliado y te reforzará como profesional, siempre que plantees un plan de mejora que te permita en el corto o medio plazo volver a ser tenido en cuenta. Si tu entorno no comprende una dilación, seguramente no merezca tu dedicación.
9.  Respeta y reconoce el desempeño de tus compañeros y superiores, piensa que su esfuerzo los ha llevado al puesto que ocupan, no obstante, comunícales respetuosamente tu discrepancia, si observas comportamientos y decisiones no adecuados.
10. Reconoce el trabajo de tus supervisados, de ellos depende tu progreso, instrúyeles en la excelencia y comparte con ellos tus impresiones sobre su desempeño. Corrige con humildad y piensa, de ser necesario, en cambiar una asignación por otra más adecuada a sus capacidades. Cada uno de los miembros del equipo tiene su responsabilidad y todos tienen la misma importancia, cuida el trabajo en equipo y no permitas que la holganza de algunos empañe el trabajo de los otros. Recuerda el tan acertado “el éxito para el equipo y los desaciertos para el responsable”
11. Comparte tu conocimiento y experiencia, es una inmejorable manera de devolverle a tu entorno parte de lo que de él has obtenido. No tengas miedo en hacerlo, sólo tu propia inseguridad podría jugar en tu contra por compartir.   
12. Sé ético y demuestra tener valores, no abuses, no impongas, sé colaborativo, accesible, respetuoso con todas las personas de tu área de influencia, desde los subordinados hasta el más exigente de los clientes, tu actitud te precederá allá a donde vayas. Y sobre todo, se consciente de que es imposible agradar a todos, asumiendo que, lamentablemente, la ética y el respeto puede generar más rechazo que las actitudes groseras, despectivas y despreciables.

Para finalizar no está de más recordar que, salvo excepciones, trabajamos porque hay alguien que necesita y está dispuesto a pagar por nuestros conocimientos y experiencia. Nadie paga para cubrir nuestras necesidades básicas y nuestros “lujos”, esto es superfluo para el pagador, es por ello por lo que cada euro tendremos que ganárnoslo.

JC

Datos personales