Urnas
sin porquerías
En marzo de 1986 decidí dejar de echar
porquerías en las urnas, por lo tanto, teniendo en cuenta que la última vez que
lo hice, y por lo que pido perdón, fue en mayo de 1983, es rigurosamente cierto
que hace la friolera de 32 años, que gobiernos, diputados, senadores, alcaldes,
ediles y demás integrantes de listas conformadas por partidos políticos, que
tan “democráticamente” fueron elegidos, no obtuvieron ninguno de ellos, mi
aceptación y respaldo. Me siento orgulloso de ello, ¡caray!, ¡qué satisfecho
estoy de no haberle facilitado el acceso al dinero ajeno a tanto ladrón forjado
a lo largo de estos más de seis lustros!
Pero hoy, en este mayo de 2015, tengo un
dilema, una gran dilema y mi dilema es no estar seguro de si hago bien o hago
mal: este año voy a votar. Mi determinación, desde el 86, ha sido no acudir a las
urnas hasta que los legisladores (iluso de mi) estableciesen listas abiertas
para que los electores, libremente, pudiésemos poner los nombres y apellidos de
aquellas personas a las que confiar nuestro voto. Mi necesidad así se vería
satisfecha, hacer un uso responsable del voto, al ser abolido un sistema en el
que las formaciones políticas configuran unas listas con personas elegidas por
un reducidísimo grupo de elitistas demagogos, que lejos de decantarse por
incluir a verdaderos representantes de los ciudadanos, limpios e inodoros, se
ocupan de atestar las listas de siervos arrodillados ante el tótem de la
“bolsa” que los amos intentarán entregarles, a ser posible, de por vida.
Bueno, para bien o para mal, mi decisión es
firme y me tomo el 2015 como sabático en lo que a abstención se refiere, y si
el resultado me satisface, a lo mejor le cojo gusto a la cosa y me dejo caer
nuevamente en brazos de la urna.
Pero para que todo no sea puro placer,
constriño mi sabático deseo, excluyendo de mi voto a aquellas listas en las que se dé alguna de estas
circunstancias:
1. Los integrantes de las listas no han sido
elegido por los afiliados o han sido elegidos por la élite dominante.
2. El partido que presenta la lista es
“enemigo” de que las listas sean abiertas, con la finalidad de que no sean los
propios electores quienes tengan la potestad de seleccionar a sus
representantes y que los elegibles no sientan un compromiso real con el
ciudadano, por encima de las servidumbres partidistas.
3. El partido y el grupo parlamentario, o
municipal, impone la disciplina de voto, para cercenar la autonomía de los
supuestos representantes de la ciudadanía.
4. El partido propietario de las listas, ha
incluido, en las que a mi me afecten o en otras, personas que están imputadas
en causas contra el interés de la ciudadanía.
5. El partido propietario de la lista, ha
votado a favor del cambio de la Constitución del 78, generando una constitución
distinta a la que los españoles votaron en su día.
6. El partido propietario de la lista ha
cercenado los derechos de los asalariados, generando incertidumbre social y
pobreza entre los trabajadores.
7. El partido propietario de la lista ha
despreciado la lealtad de aquellos que pagan sus impuesto, otorgando un trato
de favor hacia aquellos que, y puede decirse así, nos han robado al resto de la
sociedad, eludiendo sus obligaciones fiscales.
8. El partido propietario de la lista, ha
mal vendido recursos, infraestructuras y servicios públicos a empresas privadas
y ha contemplado indemnizaciones millonarias si esas empresas no consiguen los
beneficios que ellas mismas establecen.
9. El partido propietario de la lista ha
incrementado de una forma exagerada las tasas universitarias con el engañoso
objetivo de establecer las bases de una supuesta calidad.
10. El partido propietario de la lista ha
gestionado miles de millones de fondos para la formación en el empleo, para
enriquecer a su partido, dirigentes, sindicatos e incluso a empresas, que sin
ningún tipo de escrúpulo, se ha aprovechado de la desidia de los que deben de
ejercer control sobre los dineros de la ciudadanía.
11. El partido propietario de la lista, no ha
hecho absolutamente nada para separar el poder judicial del poder político,
manteniendo la perversa situación en la que fiscales y miembros consejo general
del poder judicial, se hinojan ante el dios de los partidos que los han
elegido.
12. El partido propietario de la lista, se ha
beneficiado de donaciones de empresas que a la postre han recibido
adjudicaciones de las administraciones que aquellos partidos regían.
13. El partido propietario de las lista, ha
negado medicamentos a personas enfermas cuya supervivencia depende de un
medicamento concreto.
14. El partido propietario de la lista, ha
excluido de ser atendida en la seguridad social, a personas cuya supervivencia, en este mismo
momento, está ligada a su estancia en nuestro país.
15. El partido propietario de la lista, ha
utilizado la información que le da estar en el poder ejecutivo, para
amedrentar, extorsionar a aquellos que no comulgan con sus tesis.
16. El partido propietario de la lista ha
permitido la injerencia de las
religiones en la sociedad civil.
17. El partido propietario de la lista ha
instigado al odio hacia todos aquellos que no han sido descendientes directos
de los considerados directamente legítimos descendientes de españoles.
18. El partido propietario de la lista ha
manifestado de forma concluyente su desprecio a la aceptación de la diversidad
cultural española, y ha despreciado el uso del español como lengua de cohesión
en lugar de disociación.
19. El partido propietario de la lista ha
aceptado, y se ha entregado, a las exigencias de minorías, con la única
finalidad de mantener su efímero poder.
20. El partido propietario de la lista, ha
empobrecido a la población en su conjunto y ha permitido la consolidación de
los socialmente insolidarios, como valores activos de una sociedad entregada a
la dictadura de los mercados.
Bueno, está dicho, no es fácil encontrar
una sola lista a la que poder entregar mi responsable voto, pero lo voy a
intentar. Nos jugamos mucho durante este 2015, las estructuras anquilosadas nos
están estrangulando y no debemos permitirlo.
Si mis conciudadanos dejasen de echar
porquerías en las urnas, nuestras vidas mejorarían, pero la verdad, y con la
mano en el corazón, no espero mucho del mediocre español, la picaresca y el
sacar beneficio a corto plazo es la penosa herencia que nos ha tocado compartir
con la increíble capacidad que tenemos de superar todas las adversidades. Nadie
es perfecto.
En Madrid, a dos de mayo de 2015,
aniversario de la independencia del nefasto gabacho
y con la esperanza de que también lo sea del nefasto sistema electoral español.
JC
mmmm, me parece que o votas a los arcángeles en blanco, o no votas.
ResponderEliminarCreo, sinceramente, que lo tienes complicado. Los nuevos, unos mejor que otros, no tumbarán el sistema. Y de eso se trata, creo, para conseguir una sociedad a la que representen los mejores.
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